Pero no es la única fórmula que sirve para señalar que cuando se logra una unidad, de fortalecer el músculo de las decisiones, las cosas se pueden enfrentar con mayores posibilidades de éxito.
Contando con la colaboración y solidaridad de muchas personas, ya sean fuertes o en apariencia débiles, se puede alcanzar el éxito, vencer a cualquier rival o salir airoso de una situación difícil.
El tema no puede resultarnos ajeno, en tanto en la actividades políticas que hoy observamos en todo el territorio nacional, las divergencias lo único que logran es desconcierto, dudas y muestran enormes debilidades que, luego, se podrían ver materializadas en los intentos por gobernar.
Recientemente el pre candidato a presidente de la nación, Sergio Massa, en pleno desarrollo de su campaña, en el marco de las visitas programadas, asistió a varias provincias, entre ellas San Juan, y realizó un vuelo con el actual gobernador Sergio Uñac, que le aseguró será la continuidad, del Tambolar, la obra cuestionada por La Pampa.
Junto al gobernador Sergio Uñac sobrevoló y recorrió las obras de aprovechamiento energético multipropósito “El Tambolar”, muy cuestionada por La Pampa, y los parques solares de Ullum. Estuvieron acompañados por Agustín Rossi, jefe de Gabinete de Ministros de la Nación e integrante de la fórmula presidencial, y Wado De Pedro, ministro del Interior de la Nación, entre otros funcionarios.
En su afán por ir ganando espacios, el actual Ministro de Economía, no repara en mostrar diferentes facetas de su posiciones presidencialistas. Una oferta por acá, una promesa por allá que se contradice con la anterior. Un juego de ese “maniqueísmo” que lo descoloca frente a la seriedad de temas conflictivos que han sido origen de situaciones judiciales, que aún no han sido resueltas.
Por otra parte, la obra que recorrió y que señaló como un emprendimiento al que le dará continuidad, plantea perjuicios para otros estados provinciales, que rápidamente salieron a hacérselo notar, mostrando su total disconformidad con el suceso.
En la Pampa, se registró un gesto de unidad que realmente reconforta. Mientras el gobernador Sergio Ziliotto, institucionalmente le hizo conocer a Sergio Massa su total disconformidad, posteriormente lo hizo público a través de un tuit que reflejaba, si se quiere, el enojo que producía esa actitud del funcionario nacional.
Detrás, y respaldando esa posición, se dio a conocer el posicionamiento del líder de la línea Plural, Carlos Verna, que en términos personales y que ya había utilizado en una situación similar contra el presidente Alberto Fernández, dijo “ahora nos cagó Massa”. Fuerte pero real.
Lo trascendente de estas actitudes son la coherencia de pensamiento y un consenso ideológico que destaca que la defensa de los derechos de los pampeanos está por encima de cualquier diferencia interna que pudiera o hubiera existido en el pasado. La lucha no tiene nombres propios: es la de todos los pampeanos, los de pueblos chicos y pueblos grandes. Eso es lo que nos hace realmente fuertes.
En estas circunstancias no hay héroes, ni nadie puede llevarse los laureles de la defensa del terruño pampeano. Porque la realizan los vecinos de Algarrobo del Aguila, Santa Isabel, cada uno de los oesteños, puesteros que la luchan diariamente contra las inclemencias de una tierra que supo estar bendecida por el agua del Atuel y, hoy, por el egoísmo de una provincia que se siente por encima del resto, Mendoza, la está sumergiendo en una dura pelea que -por ahora- no ha encontrado solución.
Contando con la colaboración y solidaridad de muchas personas, ya sean fuertes o en apariencia débiles, se puede alcanzar el éxito, vencer a cualquier rival, o salir airoso de una situación difícil.
No hay poderosos, hay quienes alzaron las banderas de la defensa de los derechos al agua de los pampeanos en una pelea desigual, ante estados provinciales que no cejan en su intento por manejar y disponer de una riqueza natural: el agua, que es de todos.
Los esfuerzos se deben reconocer, pero no superponerlos sobre el resto de los pampeanos que tienen profunda conciencia que el agua también les pertenece. Cuando vimos una enorme bandera sobre el seco cauce del Atuel, sostenida por alumnos, vecinos y autoridades, nos dimos cuenta que con todos se pueden lograr los mejores objetivos propuestos.
Puede haber nombres que saben y han sabido instrumentar los aspectos legales que corresponden, pero su valor, que es incuestionable, es el mismo que tiene cualquier oesteño que siente que el agua debe correr por los cauces pampeanos: las banderas nos pertenecen a todos.
Reiteramos el concepto que nos parece el más adecuado: La Unión consolida la fortaleza, con la cual los pampeanos defenderemos nuestros derechos.