Según la información brindada por fuentes policiales, el hecho tuvo lugar en las últimas horas del domingo en una vivienda del barrio Ranqueles, cuando los efectivos fueron convocados por “problemas familiares”.
Al llegar encontraron a dos hombres forcejeando, que son hermanos, y cuando intentaron separarlos, los contendientes fueron contra los uniformados.
En ese marco ambos fueron trasladados a la Comisaría Segunda, mientras que dos de los policías sufrieron lesiones, uno en su rostro y el restante en el pecho.
Durante la disputa, los agentes debieron “hacer uso del arma larga reglamentaria, efectuando dos disparos disuasivos. Mientras que se estaba procediendo a la demora, algunos de los vecinos arrojaron piedras contra los efectivos”.
Los hermanos, en tanto, estuvieron demorados durante aproximadamente 12 horas y luego recuperaron la libertad, más allá que se les inició una causa penal por atentado y resistencia, con intervención del fiscal Luciano Rebechi.