En Chile, el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) decretó la alerta roja en todo el borde costero nacional, tanto continental como insular. El organismo instó a la población a alejarse del litoral, mantenerse informada solo por canales oficiales y actuar con calma.

“El llamado es claro: seguir las instrucciones, no exponerse innecesariamente y actuar con calma”, declaró la directora nacional del mencionado ente, Alicia Cebrián.
Por su parte, el ministro del Interior, Álvaro Elizalde, informó que alrededor de un millón y medio de personas fueron evacuadas, ante la previsión de que las olas alcancen hasta tres metros de altura.
En medio del operativo, se confirmó la muerte de un hombre de 40 años en Valparaíso. Según el medio chileno La Tercera, el hombre sufrió un paro cardiorrespiratorio en un colectivo mientras evacuaba.
En tanto, en Perú el Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN) anticipó que las olas podrían alcanzar entre 1 y 2,31 metros en las próximas horas. Por este motivo, se cerraron 65 puertos y se dispusieron evacuaciones preventivas en zonas costeras.
Las autoridades de ambos países reiteraron la importancia de seguir las instrucciones oficiales y mantenerse alejados de las áreas costeras mientras dure la alerta.

Olas peligrosas

Luego del terremoto de magnitud 8.8 que sacudió este martes la costa este de Rusia, se activó una alerta de tsunami por olas de hasta cuatro metros de altura que se propagaron por el océano Pacífico.
La emergencia provocó evacuaciones masivas de hasta un millón y medio de personas desde Japón, China, Hawái, la costa oeste de Estados Unidos. En Isla de Pascua, Chile, se registraron olas por encima de los 60 centímetros mientras rige el estado de alerta roja para buena parte del país. Colombia y Ecuador dieron de baja la emergencia.
En Japón, uno de los primeros países en verse afectado por el alerta de tsunami, no se reportaron daños graves y se interrumpieron servicios de forma preventiva. En Hawái, la advertencia nacional derivó en la evacuación de playas, carreteras colapsadas y vuelos demorados. Finalmente, las olas fueron menores a las previstas (alrededor de 1 metro) y no causaron víctimas ni destrozos importantes.
Las primeras olas llegaron a la isla de Pascua, pero con menor tamaño del previsto, por lo que bajaron el nivel de alerta de ‘evacuación inmediata‘ a ‘precaución‘. En buena parte del país continúa el alerta roja.