“La verdad es que no tenemos precio. Se está hablando de que aumentará (la bolsa de harina) pero no nos dan un precio fijo como para poder movernos nosotros”, detalló, por lo que “sabemos que el precio del kilo de pan se va a mover, pero no podemos arriesgar un número todavía”.

“Nosotros no podemos dar un precio para hoy si mañana nadie lo va a mantener. Y como no sabemos si la harina que compramos hoy va a estar al mismo precio mañana no podemos arriesgarnos a producir sin cubrir los costos”, amplió.

Lamentó que “no hay estabilidad para nada. Esto comenzó a producirse el lunes, con la liberación del precio del dólar y la necesidad de que la gente del campo tenga que liquidar su cosecha. Por eso desde los molinos no nos dan precios”.

Frente a esta situación, explicó que “lo que hacemos los panaderos es vender lo que ya tenemos comprometido, un poco para darle lugar también al trabajo del empleado, pero no podemos estirarnos demasiado porque no sabemos si lo que vendemos hoy lo vamos a conseguir mañana ni a qué precios”.

“Es un problema grave, porque en otros años, también con inflación, igual teníamos un precio de harina y más o menos podíamos saber qué hacer. El lunes tendremos que sentarnos con los molinos a dialogar para ver cómo sigue esto”, completó.

Agencia Santa Rosa