En diálogo con este medio gráfico, Farías se refirió a los incendios de pastizales que en esta época del año suelen producirse con mayor frecuencia, al funcionamiento de la Escuela de Cadetes del Cuartel local y también a las tareas de los brigadistas.

En relación a los incendios de pastizales que recientemente se sucedieron en distintos predios de la ciudad y otros lugares cercanos, Farías explicó por un lado que “estamos atravesando una gran sequía” en el norte pampeano, por lo que le fuego corre rápidamente tanto en campos como en terrenos baldíos, ayudado por los vientos que regularmente soplan en agosto.

A raíz de la falta de lluvias de los últimos meses “ahora hay mucho pasto seco y también alto, lo que hace que el fuego se torne peligroso como ocurrió el fin de semana pasado en cercanías del club Trisquelia, donde había un colchón bastante grueso de pasto seco, y con la acción del viento el fuego corrió muy rápido” hasta las inmediaciones de algunas viviendas, generando alarma en algunos vecinos.
Asimismo observó que “el origen muchas veces se produce por negligencia, porque se realizan quemas de ramas o pastos cortados y el fuego se escapa y se descontrola; y también por travesuras de chicos, como hemos visto”, advirtió.

“En nuestra zona ahora tenemos mucho pasto seco y el viento soplando casi todos los días. Hay pastizal que está cerca de estructuras a las que puede afectar y también alambrados, como ocurrió días atrás en un predio cercano al barrio Federal”, agregó.

Recomendaciones

Consultado por las recomendaciones que se brindan para evitar inconvenientes mayores, el entrevistado indicó que “lo ideal es mantener los terrenos limpios, y sino hacer alguna picada en el límite, para prevenir que el fuego no pase al terreno nuestro”.

“En zona rural no se exigen picadas en los campos, pero preventivamente se necesita contar con esto para evitar que el fuego pase de un lote a otro, como ya ha ocurrido en predios con rastrojo de maíz o de soja, donde no podemos increpar con la autobomba porque el suelo se torna muy inestable” para dicho vehículo, y entonces “hay que manejarlo todo a pie”, añadió.

También recomendó “estar atentos” a la presencia de humo en un terreno y dar aviso a la Policía o a Bomberos para poder atacar rápidamente las llamas y evitar así la propagación de las mismas.

Cadetes en formación

Más adelante Farías brindó detalles de la actualidad del Cuartel de Bomberos Voluntarios de la ciudad, destacando que “está en marcha la Escuela de Cadetes, con 25 jóvenes que asisten todos los días sábados, de 14:00 a 19:00, para capacitarse y realizar distintas actividades”.

“Ahora se están preparando para un encuentro nacional de cadetes, previsto para el mes de octubre en la localidad de El Trapiche, en la provincia de Misiones”, del que participarán jóvenes de las diferentes federaciones bomberiles del país, que se interiorizarán en distintas temáticas, entre ellas “situaciones con materiales peligrosos”, adelantó Farías.

La Escuela de Cadetes de los bomberos piquenses forma a jóvenes de entre 14 y 18 años, que próximamente vivirán un grata experiencia en Misiones, al igual que poco tiempo atrás ocurrió en la localidad pampeana de Toay, en el marco de un encuentro provincial del que participaron cuarteles de La Pampa.

Agradecimiento

El referente de Bomberos Voluntarios agradeció durante la entrevista “el apoyo que siempre recibimos de los vecinos de General Pico, cuando realizamos un evento o salimos a pedir una colaboración”.

Y a título personal agradeció también “a todos los integrantes del Cuerpo Activo porque son ellos los que todos los días le ponen el pecho a las balas, digamos, para salir a los incendios y otras emergencias que se presentan, sabiendo que esto es voluntario y cada uno tiene su actividad, laboral, de estudio o padre de familia”.

Incendios en el Delta

En otro tramo de la charla, este diario consultó a Farías por una dramática situación que se vive en el Delta del Paraná con incendios que ya quemaron más de 100 mil hectáreas.

“La semana anterior estuve en Buenos Aires junto a coordinadores de operaciones de las provincias que actualmente están trabajando en estos incendios. Las tareas se realizan con brigadistas del Plan Nacional del Manejo del Fuego y con brigadistas de las provincias afectadas, es decir Santa Fe, Entre Ríos y algunas federaciones de Buenos Aires”, explicó el Coordinador de operaciones de la provincia de La Pampa.

“Se están movilizando cuadrillas de entre 12 y 20 brigadistas, a solicitud del Plan Nacional, únicamente de federaciones cercanas”, añadió.

“Sabemos que ahora se convocó al Ejército para que personal de esa fuerza colabore con todo su equipo logístico, pero al resto de las federaciones de bomberos todavía no se les ha pedido colaboración”, como sí ocurrió tiempo atrás para combatir siniestros de gran magnitud, actividad en la que se involucraron brigadistas pampeanos.

Respecto al Delta del Paraná, Farías dijo que “se trata de un terreno difícil, muy diferente al que conocemos acá. En realidad no es lo mismo un incendio forestal en Misiones, que en la Sierras de Córdoba o el monte pampeano”, señaló.

“El suelo en las Islas del Paraná es un colchón de malezas que nacen y se caen, y ahora producto de la bajante del río está muy por encima del piso”, advirtió.

Asimismo manifestó que el combate del fuego en el Delta del Paraná es complicado porque “no se puede entrar con autobombas”, y las tareas se realizan ‘con mochilas’ que portan los brigadistas, ayudados por ‘aviones hidrantes’.