Están de moda y representan lo más ‘negro y tenebroso’ del ser humano. En las primeras ‘noticias falsas’, traducción al español, de esa actitud deleznable, estuvieron orientadas a manejar mensajes en el ambiente de la farándula.
Posteriormente, cuando los autores, a los que denominan ‘trolls’ vieron que en algunos sectores de la población tenía afecto, comenzaron a utilizarlo para desgastar, humillar, ventilar cosas inexistentes y en algunos casos, con mayor sofisticación, haciendo aparecer como reales dichos y comportamientos que solo están en sus mentes enfermas.
Estamos rayando claramente la inmoralidad de un comportamiento social que camina por una línea muy delgada que separa lo legal de lo ilegal.
Es razonable entender que, en una sociedad abierta, cada ciudadano, ciudadana, puedan pensar como mejor les plazca. Pero es incuestionable y no resiste el menor análisis, que utilicen mecanismos para destruir a quienes consideran enemigos, adversarios o que piensan diferente.
Esto se asemeja bastante a darle trascendencia a determinadas denuncias vinculadas a las relaciones humanas, sin los elementos que permitan comprobar la veracidad de lo que se manifiesta.
Hay un refrán que dice: “Cuando las plumas se tiran al viento, siempre alguna queda” y eso que no se pierde, provoca una condena social, anticipada, ante la toma de posición, cuando aún, no existen elementos probatorios. Pero indudablemente el daño ya esta hecho y ese es el cometido.
Con la fake news se pretende ese mismo objetivo y hoy esta siendo utilizada para provocar el debilitamiento de los personajes que están desarrollando sus campañas electorales con miras al ballotage que se cumplirá el 19 de noviembre.
“Actualmente vivimos en una sociedad repleta de noticias falsas que deambulan por los Medios de Comunicación. Esto supone un severo problema a la opinión pública, pero aún más a la población joven. Estamos haciendo que una nueva generación crea en informaciones falsas y que incluso afecte en la manera de pensar de dicha generación real”.
“Las redes sociales han sufrido un cambio fundamental en la forma de acceso público, consumo y difusión de noticias. El paradigma anterior (los medios tienen una gran cantidad de usuarios en plataformas como Twitter, Facebook o Tik Tok, que los usan como medios de información. En gran parte, la razón de este cambio dramático en el comportamiento del consumo de medios es el interés en construir comunidades basadas en las redes sociales”.
Lo grave de este razonamiento que parte de un estudio de los efectos de las ‘noticias falsas’ de Mario Díaz Vicente, cuya especialidad le permite tener una visión acabada, donde tiene más penetración y adquiere una relativa credibilidad y los efectos nocivos que produce, donde se puede tener una idea real de que pese a no ser cierta, siempre encuentra sectores que las aceptan como reales.
En diferentes posteos de la red Tik Tok se promociona una información relativa a un mensaje político que hace la madre filicida Magdalena Espósito Valenti, cuya víctima fue el niño Lucio Dupuy, quien aconseja votar a Massa. Una “fabulación que tiene al menos dos años”.
Hay varios factores para analizar,más allá que resulta totalmente inapropiada la fake, porque todavía esta muy sensibilizada la sociedad ante lo ocurrido que le costara la vida a un niño.
Por otra parte apelar a un subterfugio de esa naturaleza para lograr la reprobación de la ciudadanía es realmente una actitud execrable de quienes creen que es un mecanismo adecuado para desgastar un político en campaña.
Todo estaría indicando que estas cuestiones son contraproducentes y logran un efecto contrario al buscado. La sociedad se siente vulnerada en sus principios, en su dignidad, porque resulta ‘un golpe bajo’, que demuestra que ya nadie repara en nada para lograr objetivos.
En alguna de nuestras entregas mencionamos que estábamos ante una de las campañas electorales más agresivas, violentas, inmorales que no ha reparado en inventar situaciones o utilizar la inteligencia artificial, para transformar determinas expresiones en ataques que afecten a la ciudadanía o parte de ella.
No creemos que esto de los resultados que esperan quienes los generan. La sociedad esta mostrando que se encamina hacia un profundo cambio conceptual y pretende de sus políticos que le acerquen programas, propuestas, acciones a ejecutar si son gobiernos y fundamentalmente que comiencen a mirar más a la comunidad y dejen de verse el ‘ombligo’ pensando que son el eje del ‘mundo’ argentino.
Las ‘fake news’, son absurdas mentiras, que la sociedad debe comenzar a rechazar.
Escriba su comentario