La Reforma visitó en varias oportunidades la Biblioteca Popular Juan del Rosario Garro para conocer las propuestas que allí se desarrollan, oportunidad en la que también tomó conocimiento sobre la particular actividad que desempeña a modo de hobby Carolina Frigerio, psicopedagoga del Centro de Salud Brown, a cargo justamente de un taller relacionado a la lectura de libros en la mencionada biblioteca, y que tiene que ver con realizar objetos de papel.
En diálogo con este medio, Frigerio detalló que “el interés apareció porque a mi me gustan mucho las bitácoras, que son cuadernos de viajes; en una oportunidad me hice una muy artesanal sin saber nada de encuadernación y luego, estando en Córdoba, conocí a una chica que hace encuadernaciones y me sumé a su taller en donde aprendí técnicas sobre la temática; de a poco fui descubriendo cosas, para mi es todo un mundo porque tiene infinidades de posibilidades, de aristas, de lugares para seguir investigando”.
Con esta técnica, también ha intervenido libros ya que ‘me gusta ir probando sobre distintos soportes y donde la invitación sea la sorpresa y descubrir que puede haber algo donde uno no lo espera; lo mismo hice en latitas de atún y en objetos pequeños‘.
“Empecé hace siete años esta investigación con el papel, hice talleres de “pop up”, que son técnicas que se despliegan cuando uno abre o pliega el papel, se van generando formas y eso me llamo mucho la atención, me apasionó cómo algo tan sencillo o cotidiano como el papel puede tomar forma, cuerpo, tener variaciones de acuerdo a como uno lo pliegue, lo cale; es que de acuerdo al tiempo y la atención que uno pone en ese objeto cotidiano, surgen las transformaciones, que son infinitas”. 
Aseguró que “cada momento que yo paso en el taller es sentarme a jugar con el papel, explorarlo, darlo vuelta, probar un papel más fino o más grueso, usar revistas viejas, de distintas formas y colores y ahí ver qué sucede en ese encuentro en donde lo tengo, lo doy vuelta, me espera hasta que en algún momento surge algo”.
La entrevistada comentó que en plena pandemia “es donde potencié el saber sobre la temática, me puse a investigar sobre el papel y comencé a hacer casitas, ya que esto de tener que estar adentro de nuestra casa fue un modo de ir pensando qué tipo de vivienda podía armar con un papel, entonces fui elaborando la estructura e investigando para construir cosas pequeñas para ponerle adentro, la silla, la mesa, todo en miniatura” y añadió “el desafio es también ir creando los elementos lo más pequeños posible, o si esa casa puede tener dos pisos, una escalera, en fin, la acción principal para mí es jugar”.
Y expresó: “Para mi es un hobby, un tiempo donde me desconecto de otras cuestiones y me conecto al disfrute, a explorar, a ver que otra cosa se puede crear, pero por el placer de hacerlo; después surgió como un emprendimiento, pero no lo promociono mucho porque no es el objetivo final, sino que lo importante es el papel en sí y encontrarme con este recurso en todas sus potencialidades, y de ahí la posibilidad de compartirlo con quien le interese algo de toda esta producción; en ese sentido voy compartiendo en redes, abriendo la puerta de mi taller y mostrando esto que hago”.

Reciclar

Esta actividad es si se quiere una forma de reciclar ya que “es tan valioso el papel y tan cotidiano a la vez, pero hay veces que desperdiciamos mucho; en este momento me encuentro realizando barquitos en miniatura con papel de una guía de teléfono y mientras lo hago pienso como puede habitar un objeto que ya no se usa casi, en otro; por eso esto de reciclar, de volver a mirar lo que tenemos con otros ojos, de darle otra oportunidad y que eso vuelva a ser útil”, valoró.
En relación a la técnica, mencionó que “voy haciendo una composición de distintas técnicas, ya que la papiroflexia o el origami refieren al plegado del papel, pero también incluyo papercutting, que es como el calado de papel, y en la sumatoria de todo lo que uso, sale mi composición; incluyo también tijeras, pegamento, un cutter de precisión, una plegadera, que es la que marca los bordes, es realmente todo muy minucioso”.
Y completó: “No conozco a nadie que haga lo mismo en la ciudad, por eso este hacer es solitario, hay muchos talleres, de todo tipo, de manualidades o de cerámicas, pero de papel específicamente no he encontrado”.

Laboratorio “Entre papeles y palabras”, en el Centro de Salud Brown

Carolina Frigerio junto con su colega Guadalupe Irrazabal, sostienen en el Centro de Salud Brown un espacio para adolescentes donde ‘estamos construyendo un libro, una investigación con la escritura y también de armado de libros; muchos jóvenes se interesaron por textos que se despliegan y a partir de esto surgió la posibilidad de armar un taller los días viernes, cada quince días, por la mañana‘.
Taller “Amasando palabras con madres”
Esta iniciativa se lleva adelante en la Biblioteca Juan del Rosario Garro del barrio Malvinas, y está destinada a las familias del lugar y de la Escuela Nº64, edificio en donde funciona la institución. Los encuentros se realizan de manera mensual, “en donde el libro es la herramienta para concretar las actividades que se plantean, como en el último de los encuentros realizados previo al inicio del receso escolar, en donde hicieron un búsqueda del tesoro con objetos hechos de papel, acompañados de una poesía”, precisó Frigerio.