Con el correr de las horas, lo que parecía una extrañeza, se rebeló como algo más lógico: el chacho pertenece a una familia del pueblo, que lo crío desde cachorro. En las últimas horas, sus propietarios cumplieron con la obligación legal de entregarlo a autoridades de Fauna y patrullas rurales para que lo devuelvan a su hábitat natural.

Sin embargo, ese “hábitat natural” habría sido la casa de uno de los responsables del operativo, quien incluso lo había pedido a la familia en ocasiones anteriores, según informaron desde medios guatrachenses.

En ese marco -o en la supuesta “devolución”- el animal se escapó y retomó el camino hacia su casa, generando el cuadro que lo convirtió en noticia durante todo el día porque, además, nunca regresó a la vivienda que habitaba, motivo por el cual algunos vecinos, conmovidos por el sentimiento de las niñas de la familia de “crianza” organizaron campañas de búsqueda en las últimas horas.

Agencia Santa Rosa