Tobías, envuelto en lágrimas de una emoción interminable, aseguró: “Jamás en mi vida me voy a olvidar de esto”. “Tuve la oportunidad y me propuse aprovecharla a pleno, porque merecíamos quedarnos en la categoría”.
Tobías tuvo que asumir la titularidad del arco de Ferro de Realicó ante la suspensión de Fredez y con sus 22 años y muy corta experiencia en la división mayor, realmente fue decisivo, no sólo atajando los penales claves en la definición menos deseada, sino con notables intervenciones en los dos partidos salvando la caída de su arco. “Sé que era muy difícil pensar que un pibe le podría brindar seguridad en el arco en estos cruces donde hay mucho en juego, pero sentí el apoyo desde afuera, de mis compañeros y dio todo lo que pude”, afirmó Tobías Moreno.
Al consultarlo sobre su faena en los penales, recordó que “tuve una definición de estas características en Catriló, donde también atajé dos penales. Pero esto es otra cosa, mucho más trascendente”.
En cuanto a dedicatorias, la emoción llegó a lo máximo acordándose de “la familia y de mi abuelo que está en el cielo y no pudo verme acá”.

“Es muy loco todo”, dijo Santiago Martínez

Si de cosas importantes que le pueden pasar a un jugador a tan corta edad, está el caso de Santiago Martínez. Con 18 años, le metió el agónico gol a Sportivo Independiente que salvó a Ferro de descenso directo. En el partido de ida con Cultural Argentino metió el gol que aseguró la victoria (el segundo) y ahora, en la definición por penales tomó la responsabilidad de patear el último, el que decidió que Ferro de Realicó siga jugando en primera división. “Es muy loco todo lo que me ha pasado en cuestión de semanas. Todavía no caigo de lo que me está pasando, porque esto es el principio de mi carrera futbolística en primera división que ojalá siga teniendo momentos inolvidables”.
En cuanto a los penales y el que le tocó patear a él, “siempre me tengo mucha fe, pero mis compañeros me lo hicieron sentir al decirme, definilo vos, y por suerte salió así”.
Martínez pidió dedicárselo a su familia: “Ellos son los que siempre me acompañan y se merecen esto tanto o más que yo. Y también a toda esta gente que vino hasta acá, son únicos, fantásticos”.

“Es lo que me faltaba”, dijo Tapia.

Y si de emociones y merecimientos se trata, Sandro Tapia es la síntesis de un hincha del club que asumió los desafíos que Ferro le presentó en el camino: “fui presidente de todas las subcomisiones de fútbol, delegado, presidente del club y ahora como técnico tener esta posibilidad, es lo que me faltaba y es maravilloso”.
“Lo conseguimos con estos guerreros, ya sea los más experimentados como los pibes de quinta división que hicieron un gran esfuerzo para que Ferro quede en primera división”, remarcó sobre este objetivo cumplido.
Al preguntarle sobre lo que pasará el año que viene, con el clásico con Sportivo, expresó que “seguramente va a ser muy lindo, porque hace mucho tiempo que no se da, ya que el destino o el fútbol quiso que cuando uno estaba en una categoría, el otro estaba o abajo o arriba, bueno mientras sea positivo para el fútbol y para el pueblo, bienvenido sea”.
Sandro no dejó pasar la posibilidad “para felicitar a Sportivo, que logró el ascenso, con un gran técnico y amigo, Poli Feroglio, que conozco y quiero mucho”.
Tapia, sin nombrarlo, le dedicó este logro “a una persona que siempre confió en mi, que me dijo que me tenía que hacer cargo del equipo, antes de que me lo ofrecieran. Para esa persona va este triunfo”, finalizó.