La sustracción del automóvil Suzuki Fun, de color gris, tuvo lugar de una cochera ubicada en calle 22 entre 15 y 17, donde su propietario lo había dejado estacionado con las llaves puestas y las puertas abiertas, por lo que se trata de un delito de "hurto", sin violencia para su cometido.

El hecho fue denunciado en horas de la mañana del miércoles en la Comisaría Primera, y desde la Unidad Regional II se ordenó realizar un "operativo cerrojo", con la intervención de distintas unidades policiales de esta ciudad y otras localidades del norte pampeano, incluso Puestos Camineros.

La búsqueda del vehículo denunciado tuvo éxito horas más tarde, cuando una empleada policial del área de Siniestros Viales, lo halló abandonado en el barrio Carlos Berg, precisamente en calles 7 y 48, a la sombra de un árbol.

Seguidamente personal de la Agencia de Investigación Científica realizó un peritaje en búsqueda de "rastros", y también se convocó al lugar al denunciante, que reconoció al rodado de su propiedad.

El caso fue caratulado como "hurto de automotor" y en el mismo tomó intervención el fiscal piquense Juan Cupayolo. La investigación busca valerse de material de cámaras de seguridad, con el fin de identificar al autor del ilícito.