El club Matadero por la Lealtad en donde juega el futbolista Enzo Figueredo, agresor del árbitro Shair Salomón en el partido entre ese club y Centro Oeste por la Primera B, pidió ayer “disculpas” públicas al juez y se comprometió a “sancionar conductas que no hacen bien al deporte en sí mismo”.
Figueredo atacó a golpes a Salomón luego de que el juez lo expulsara sobre el final del cotejo, cuando Matadero caía 0-4. Como reacción, emprendió una larga carrera con evidentes intenciones de agredirlo. En su intento de escapar del lugar, el referí cayó al suelo y allí fue alcanzado por el defensor, quien le dio un par de golpes que obligaron a retirarlo del campo en camilla.
La consecuencia fue la suspensión del partido y una inflamación en la frente de Salomón, aunque afortunadamente no hubo consecuencias peores.
“Desde nuestra institución se tomarán las medidas necesarias y se sancionarán las conductas que no hacen bien al deporte mismo”, dijeron desde el club, desde donde afirmaron que “no toleramos ninguna actitud que atente contra el respeto, la disciplina y los valores que representan a nuestro club” y manifestaron su “más enérgico repudio” a lo sucedido.
Reunión
También la Liga Cultural se pronunció al respecto, alegando su “más enérgico y categórico repudio” a lo que pasó y precisando que en ese marco se convocó a una reunión de los responsables de los operativos de seguridad de las canchas y a los árbitros de las diferentes agrupaciones con el fin de “analizar en profundidad las situaciones de violencia que se vienen repitiendo” en distintos escenarios y “proyectar en forma conjunta una estrategia de trabajo que permita prevenir y sancionar” este tipo de episodios.
Finalmente, informaron que se “adoptarán las medidas disciplinarias pertinentes en conjunto con el Tribunal de Disciplina conforme a lo establecido por la normativa vigente. La violencia no será tolerada en ninguna de sus formas”.
Agencia Santa Rosa
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