El Ministerio de Educación de La Pampa llevó adelante un ciclo de encuentros titulados “Diálogos para la Convivencia Escolar”, el mismo comprende encuentros virtuales y una jornada presencial de construcción colectiva de aprendizajes.
Los encuentros iniciaron en el mes de abril y continuan hasta la finalización del ciclo lectivo. Los mismos se acreditan en RedPam, (Red de Pampeana de Formación Docente Continua); del trayecto participan asesores pedagógicos, regentes generales, auxiliares docentes, coordinadores de curso y de ciclo, técnicos de nivel Secundario, de la Subsecretaría de Educación técnico profesional, profesionales de Equipos de Acompañamiento de la Dirección de Transversalidad de la Educación Inclusiva y el equipo técnico de Políticas del Cuidado.
El objetivo principal de esta iniciativa es brindar herramientas y generar un espacio de reflexión colectiva desde una perspectiva de derechos, pluralidad y diálogo. El desafío es el fortalecimiento de prácticas escolares relacionadas con la convivencia, la revalorización del diálogo como estrategia para abordar y resolver conflictos. Se busca fomentar la reflexión sobre las subjetividades de la época, cuestionando prejuicios y estereotipos en torno a la adolescencia.
El trayecto formativo “Diálogos para la convivencia escolar” propone reflexionar sobre el rol del adulto desde un encuadre de respeto a las diferencias y la diversidad, la construcción de identidades y proyectos de vida que promuevan la solidaridad, la igualdad, la libertad y la cooperación. También se focaliza en el encuadre normativo a partir del cual se promueve la participación democrática para la construcción de acuerdos escolares de convivencia.
Natalia es asesora pedagógica de la EPET Nº 5 de Macachín. Agradeció la invitación en pos de repensar las instituciones y enfocar las prácticas desde la prevención y la restauración, viendo el conflicto como una oportunidad de aprendizaje y mejora al interior de las escuelas.
Vanesa es subgerente técnico de la EPET Nº 1 de Santa Rosa. Contó que el trayecto le brindó ideas para implementar actividades menos convencionales y enfatizó la importancia del trabajo comunitario entre docentes, directivos y estudiantes para construir la escuela deseada.
Pablo, del programa de inclusión educativa “Vos Podés” en Toay, valoró el acompañamiento y la escucha hacia los y las adolescentes para incidir en su educación y vida. Destacó el desafío de integrar las ideas y comparar la escuela antigua con la actual, y observó el cambio positivo que se produjo en los y las estudiantes.
Seguidamente Claudia, del Centro Educativo Polivalente de 25 de mayo, señaló que “puedo pensar en varios estudiantes, pero recuerdo a uno en particular porque me identifico con él, por lo transgresor de las reglas y porque finalmente entendió que el sistema no es para castigar, sino que nos permite aprender”. Sobre lo más gratificante de su trabajo mencionó que le encanta “ver cómo podemos cambiar a nuestros estudiantes para bien, cómo podemos aprender un montón de ellos y cómo podemos entender que como personas podemos cambiar justamente”.
En tanto, Daniela del Colegio Secundario Panguitruz Nger de Santa Rosa, también valoró el trayecto como un espacio de intercambio de prácticas con otros asesores pedagógicos, enriqueciendo su labor en la escuela.
Cecilia, asesora pedagógica de la Escuela Agrotécnica de Victorica, consideró el encuentro como un punto de inflexión que resignifica la convivencia escolar y las trayectorias educativas, reconociendo la continuidad del trabajo que se realiza actualmente.
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