Manchester United pisó fuerte en San Mamés y goleó 3-0 a Athletic Bilbao en la ida de las semifinales de la UEFA Europa League. Con un gol de Casemiro y un doblete de Bruno Fernandes, los Red Devils, que tuvieron a Alejandro Garnacho de titular, sacaron una importante ventaja y pusieron un pie en la final, que buscarán sellar el próximo jueves en Old Trafford, donde los vascos, que se quedaron con diez por la expulsión de Daniel Vivian, intentarán la heroica remontada.
En apenas cinco minutos, Garnacho se fue mano a mano tras una habilitación de Ugarte, definió cruzado ante Agirrezabala y rompió el cero, pero el árbitro lo anuló por posición adelantada del argentino, que el VAR confirmó. Apenas pasada la media hora, llegó el primer tanto: Maguire desbordó bárbaro por derecha, metió el centro al área para Yoro, que cabeceó al segundo palo y apareció Casemiro para empujarla.
Unos minutos más tarde, Garnacho se escapó por derecha, y asistió a Höjlund, que recibió una infracción de Álvarez. El juez fue llamado por el VAR y, tras la revisión, sancionó penal y expulsó a Vivian. Fernandes se hizo cargo y estiró la ventaja. Para colmo, sobre el final del PT, luego de una serie de rebotes en la medialuna, Ugarte metió un gran taco que dejó solo a Bruno, quien la cruzó para decretar la goleada. En el ST, con el abultado resultado, el encuentro bajó en intensidad y no hubo más emociones fuertes.
Por su parte, Tottenham fue ampliamente superior y derrotó 3-1 a Bodo/Glimt por la ida de la restante semifinal en el Tottenham Stadium de Londres, un resultado que no reflejó el dominio a lo largo del encuentro pero que deja al equipo de “Cuti” Romero a las puertas de la final.
Los Spurs triunfaron con goles de Brennan Johnson, James Maddison y Dominic Solanke mientras que la visita logró descontar con el tanto de su capitán Ulrik Saltnes, un grito que siembra la esperanza de un remontada ante su público en Noruega y deja un sin sabor en los locales que esperaban liquidar la historia antes de tiempo.
La gran sorpresa del certamen sufrió un muy duro revés en Londres pero su tardío descuento hace que la llave siga viva de cara a la revancha de la próxima semana, pese a los mejores intentos del local por ya ponerle un punto final al pleito. La historia no podría haber comenzado de mejor manera para el equipo londinense, ya que Johnson consiguió la primera ventaja a los 37 segundos tras el preciso cabezazo de Richarlison que logró habilitarle y definir solo abajo del arco.
A los 34 Maddison logró ampliar la ventaja, tras un gran pase de Pedro Porro que le permitió quedar mano a mano y rematar con gran clase para estirar la diferencia ante un abrumado elenco noruego. La segunda mitad siguió con el dominio del local, que logró a los 13 encontrarse con un penal a instancias del VAR por infracción sobre Romero, disparo que Solanke cambió por gol para transformar la victoria en goleada.
Los Spurs siguieron su dominio, pero su pólvora se mojó y la visita -en una de sus pocas llegadas- logró descontar por parte de Saltnes que le da vida a la máxima revelación del certamen. La serie se definirá el jueves 8 en Aspmyra Stadion, con capacidad para algo más de 8.000 hinchas y césped artificial, un escenario casi insuperable para quienes lo visitan, por el frío extremo y las condiciones adversas donde desde 2020 ganaron 30 de los 37 partidos disputados ahí en competiciones europeas.




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