Este año, la Fiesta Patronal de Nuestra Señora de la Merced, se enmarcan en el Jubileo del Año Santo de la Esperanza.

El día central de la celebración tuvo lugar el miércoles 24 de septiembre, con un evento de gran relevancia para la comunidad católica local, que se concentró en gran número frente al céntrico edificio de calle 18 entre 9 y 11, espacio en el que se interrumpió la circulación vehicular durante la ceremonia.

A las 20:00 horas, en el atrio de la parroquia, sobre la calle 18, se celebró la confirmación de 200 jóvenes y adultos. Este significativo número generó gran alegría y sorpresa en la parroquia, siendo considerado un hecho histórico.

Fueron parte del Sacramento de la Confirmación, todas las personas que forman parte de las comunidades que integran la familia parroquial de la Merced, no solo de la ciudad, sino también de localidades vecinas.

En este sentido, se confirmaron chicos de Dorila, de Agustoni, del Sagrado Corazón, de Santa Teresita, del colegio Instituto Nuestra Señora y del Colegio Los Caldenes, de General Pico. Y también quienes son parte del centro de la parroquia.

La misa y procesión de este día tan especial estuvieron presididas por el obispo Luis Darío Martín, actual administrador diocesano, quien es oriundo de General Pico y su vocación sacerdotal nació justamente en la Parroquia "Nuestra Señora de la Merced".

Jubileo del Año Santo de la Esperanza

Las celebraciones comenzaron con la novena, que se llevaron a cabo todos los días a las 19:30 horas, seguida de la misa. Este período de preparación, se extendió hasta el 23 de septiembre, centrado en la reflexión sobre la esperanza, un valor fundamental en el contexto del año jubilar.

A su vez, se realizaron peregrinaciones y actividades comunitarias desde principios de septiembre. La imagen peregrina de la Virgen de la Merced ha recorrido diversas comunidades como Agustoni, Dorila, los barrios Molino y Este, y actualmente visita escuelas del centro de la ciudad, continuando su recorrido en los primeros días de octubre.

Otra de las actividades enmarcadas en esta celebración fueron una peregrinación desde la puerta del templo de Nuestra Señora de la Merced hacia la Parroquia de Pompeya, designada como iglesia jubilar de la ciudad. Y una bici-peregrinación desde el Monumento a la Virgen del Campo (Ruta 1 y calle 24), actividad que reunió a familias y jóvenes llevando la imagen de la Virgen en bicicleta.