La muerte de “El Negro” Bravo, como se conocía popularmente al piquense, impactó en gran parte de la comunidad durante la jornada. En horas de la mañana se confirmó la existencia de un hombre fallecido a bordo de un automóvil Renault Sandero, en cercanías del hipermercado Diarco, tras golpear un árbol en una banquina de la Ruta 1.

En el lugar se montó un amplio operativo policial y judicial, con la presencia de peritos y autoridades, marco en el cual se brindaron algunos detalles de lo ocurrido y trascendió que la víctima era José Luis Bravo, de unos 60 años de edad, información que fue confirmada cerca del mediodía.

En el hecho tomó intervención el fiscal Guillermo Komarofky quien ordenó la realización de distintas diligencias para establecer las causales de muerte y la “mecánica” del hecho, teniendo en cuenta que algunos “trascendidos” daban cuenta que se habrían escuchado detonaciones de arma de fuego antes que el automóvil impactara un árbol.

Precisamente en horas de la tarde se conoció el resultado de la autopsia que estableció que José Luis Bravo no sufrió “una muerte violenta”, sino una descompensación cardíaca antes de la colisión, por lo que se definió al deceso como “muerte súbita”.

Igualmente, se supo esta noche que la Justicia investiga la existencia de “una posible gresca” antes del trágico hecho, con intervención de distintas unidades policiales como son la Comisaría Tercera y la Brigada de Investigaciones de la Unidad Regional II.

En tal sentido cabe mencionar que el fiscal Komarofky indicó en diálogo con la prensa local que es materia de investigación confirmar o descartar si Bravo protagonizó una gresca antes de padecer el paro cardíaco que produjo su muerte.

Para esto es “fundamental” el material de las cámaras de vigilancia que funcionan en el lugar.

Al momento del hecho Bravo viajaba por la Ruta 1, sin acompañantes, a bordo de un vehículo Renault Sandero.