Un combate que pareció de trámite cerrado, parejo, en el cuál se vió a dos boxeadoras con estrategias claramente marcadas, y que en su desarrollo se percibió parecido a la primera versión ocurrida en septiembre del año pasado. La retadora con su guardia cerrada y plantada en el centro del ring, presionó constantemente, tratando de achicarle las salidas a su rival, y en ofensiva trabajar con volumen proponiendo los cruces e intercambios, encontrando en su derecha en punta su arma más potente. 

En esa búsqueda, Bermúdez fue agresiva, precisa, y redondeó una muy buena actuación. En cambio, Meinke trató de no ser un blanco fácil usando para eso sus piernas para moverse durante todo el ancho del cuadrilátero, y conectar desde afuera con las combinaciones de upper y cruzado, y sus golpes largos. Ambas tuvieron sus momentos, pero en los detalles a la santafesina no le alcanzó a los ojos de los jueces. A pesar de la diferencia que marcaron las tarjetas finales, fue una sólida performance de la Bonita.

En su debut en la temporada 2025, la oriunda de Villa Gobernador Gálvez sumó su sexta derrota en el campo rentado, en el marco de una carrera que ya es histórica y en la que supo ser campeona mundial en tres divisiones.