Fabricio Sebastián Trinchieri fue condenado a 12 años de prisión por el delito de abuso agravado en perjuicio de una niña de 7 años, hija de su expareja, pero cuando la Policía fue a detenerlo ya no estaba en el lugar que había fijado como residencia.
A partir de ese momento, en octubre del año pasado, la Policía comenzó la tarea de tratar de ubicarlo. “Tomamos conocimiento que estaba trabajando en un restaurante de un argentino en Florianópolis, pero cuando la Policía de Brasil e Interpol fueron a buscarlo, ya había dejado ese lugar. Sabíamos que estaba en ese país, y ahora lo detuvieron durante un control vehicular”, sostuvo la jefa policial al ser consultada por La Reforma.
Según se determinó, Trinchieri había cambiado su fisonomía. En las fotos que se habían difundido en distintos ámbitos, fundamentalmente en General Pico, se lo veía con el pelo corto, pero ahora se lo observa con rastas.