DOMINGO 15 de Septiembre de 2024
 
 
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Jugando con las instituciones

Las estrategias de campaña dan para cualquier cosa, aprovechando que una gran parte de la ciudadanía no está interiorizada de las normativas que rigen a los poderes del Estado, como estructura de funcionamiento.

Llama poderosamente la atención que no existan límites para que los políticos que pretenden tribunas, elijan el Congreso de la Nación para poder lograrlo.

Tras dos años como diputado nacional, Javier Milei presentó sus primeros proyectos y el pedido de una sesión especial. El candidato a Presidente elaboró cuatro proyectos de Resolución en donde pide informes al Ejecutivo sobre los rehenes argentinos que tiene el grupo Hamás.

“Un proyecto de Resolución es toda proposición que tenga por objeto el rechazo de solicitudes particulares, la adopción de medidas relativas a la composición u organización interna de la Cámara, los pedidos de informes basados en las facultades investigativas de las Cámaras y, en general, toda disposición de carácter imperativo que pueda tomar la Cámara por sí, sin intervención de otro poder, y que no esté comprendida en el artículo 118 de este Reglamento (Art.117)”.

Como han querido los redactores del Reglamento, los Proyectos de Resolución deben reservarse para aspectos vinculados a la organización interna y funcionamiento de la Cámara, a los pedidos de informes, y a las medidas que puede tomar la Cámara por sí sola; es decir, sin la intervención de ningún otro poder y dentro de su esfera de competencia.

Hemos pretendido, en forma sintética dar a conocer los encuadres normativos que alcanza una herramienta que tiene el legislador para determinadas inquietudes que procura se le aclaren.

El libertario Javier Milei, desde su banca de Diputado Nacional, propone una sesión especial, casi sobre el filo del balotaje, para que el Estado responda a sus inquietudes personales, que señalan un marcado interés por generar un posicionamiento que puede acercarle votos.

El suceso, que hoy pretende poner en discusión, tuvo inicio el pasado 7 de octubre, cuando el movimiento palestino Hamás realizó una incursión desde la Franja de Gaza en las zonas fronterizas del sur de Israel, por lo que el primer ministro del Estado judío, Benjamín Netanyahu, declaró que el país estaba “en guerra”.

Estamos a treinta días del cruel episodio bélico-terrorista, que ha costado miles de víctimas y que mantiene más de 220 entre mayores, niños y bebés en calidad de rehenes y nos resulta -por lo menos es llamativo- que a 30 días recién ahora surja la preocupación del político por saber qué se ha hecho por los rehenes argentinos en poder de Hamás.

Según ha trascendido y varios medios capitalinos han reflejado en sus páginas, la intención del fundador de LLA, es verificar el consenso que obtiene entre sus pares, marcando claramente que lo anima una cuestión puramente de campaña, utilizando para ello un tema tan complejo y delicado como el de Medio Oriente.

La sesión fue convocada para mañana -miércoles 8 de noviembre-, a las 10, y “el temario sólo incluye los textos promovidos por el libertario, quien deberá demostrar su capacidad de lograr consensos, ya que su bloque cuenta con sólo 3 diputados y necesita otros 126 para lograr el quórum que habilite la discusión”.

En su momento la oportunidad de esta gestión, que hoy pretende el candidato a la presidencia por el liberalismo, hubiera resultado elogiable y entendemos, nadie hubiera optado por no sentarse en su banca, y demostrarle al país que defender a los ciudadanos es necesario sin hacer mención al color político.

Pero, hacerlo hoy, cuando ha trascendido que su accionar es un intento por retener la “huida” de muchos de sus legisladores que no comparten los acuerdos realizados por él -ahora moderado- Milei, porque entienden se ha corrompido la esencia que dio lugar, fundamentó y consolidó a la Libertad Avanza es, por lo menos, criticable.

Las primeras voces negativas ya trascendieron basadas en que este “Llamado a sesión ya fue formalizado, pero ahora falta saber si Milei cuenta con el apoyo necesario para abrir el recinto”.

Desde el oficialismo se mostraron reacios al pedido, ya que entienden que se enmarca en una jugada electoral de parte del libertario. “Usar un tema tan delicado para posicionamiento electoral a mi criterio es un error”, señaló una alta fuente del bloque del Frente de Todos - Unión por la Patria. Asimismo, recordaron que “la Cámara de Diputados aprobó hace 20 días una resolución al respecto”.

Reiteramos, no todo es utilizable. Existen límites que pareciera Javier Milei no los percibe, animado por su entorno que pretende salir del ‘atolladero’ que significó convenir sin acuerdo con otra fuerza para lograr llegar al “Sillón de Rivadavia”.

El respeto hacia las instituciones es obligación de todos, sino estaríamos ante una actitud anarquizante poco saludable para la Argentina.

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